Hoy viajamos a Chuy, una ciudad fronteriza que cuenta con extensas playas y un destino en donde la integración de culturas es un atractivo en sí mismo. Con solo dar un par de pasos, puedes tener un pie en Uruguay y otro en Brasil. El español y el portugués se mezclan con el árabe, puesto que allí viven muchos inmigrantes musulmanes. A este interesante choque de culturas se suman hermosos escenarios naturales, una buena gastronomía y buenos servicios para el viajero.
Uno de los grandes atractivos de la ciudad es Barra de Chuy, el balneario más oceánico de Uruguay y un lugar con una biodiversidad impresionante. Tanto su mar, su costa como la zona continental dan cobijo a una gran cantidad de especies de flora y fauna. Al mismo tiempo, su playa de arenas finas que forman grandes dunas es perfecta para dar largas caminatas, realizar cabalgatas y mucho más. En definitiva, Chuy es otro lugar más de los cuales Uruguay puede mostrarse orgulloso.
Chuy nació alrededor del año 1914, gracias a la instalación de una estación intermedia de telégrafo inglesa. Mediante el tendido submarino, se mantenían las comunicaciones entre Montevideo y Porto Alegre. Sin embargo, no fue hasta la década de 1930 que la ciudad comenzó a funcionar como balneario.
Hacer turismo de compras
Chuy es conocida por su oferta comercial y precios bajos, a tal punto que sus paseos de compras son el gran atractivo de la ciudad. Podríamos definir a Chuy y su homónima como un gran shopping a cielo abierto. A lo largo de sus calles y avenidas principales aparece una impresionante oferta de free shops, ferias y tiendas que veden desde perfumes, hasta bebidas, cosméticos, relojes, artículos de bazar y todo lo que te puedas imaginar.
Día tras día, miles de turistas cruzan la frontera para comprar productos a precios accesibles en Chuy. La Avenida Internacional traza el límite entre el Chuy y Chui y es el epicentro de la actividad comercial de la ciudad. Allí se alzan las mejores tiendas donde podrás conseguir lo que busques y a mitad del precio, comparado con otros puntos del país.
Disfrutar de su carnaval
Todos los años, Chuy y Chui trabajan en conjunto para poner en escena la mayor fiesta de carnaval del este de Uruguay. El Carnaval Sin Fronteras de Chui – Chuy es una fiesta de singular belleza de la cual participan las escuelas de samba, murga y candombe de Río Grande do Sul, Pelotas y Santa Victória do Palmar (Brasil). A ello se suman diversas agrupaciones de Montevideo, Maldonado, Rocha, Lascano y otros puntos del país.
Por eso, si viajas a Chuy en el primer fin de semana de marzo, serás testigo de este espectáculo único que da muestra de la buena relación que hay entre ambos países, en esta parte de la frontera.
Barra del Chuy
A 8 km de la ciudad del Chuy se ubica Barra del Chuy, el último balneario de la costa del departamento de Rocha, antes de entrar a territorio brasilero. Se trata de un lugar tranquilo y seguro, en el que encontrarás una buena oferta de actividades de entretenimiento, una agitada vida nocturna, playas con dunas, grandes bancos de arena y bellos paisajes.
El paisaje costero de Barra del Chuy se encuentra marcado por la desembocadura del arroyo Chuy, la Laguna Merín y el Océano Atlántico.
Arroyo Chuy
El arroyo Chuy (arroio Chuí en portugués) hace de frontera natural entre estos países. Su nacimiento tiene lugar en el municipio brasileño de Santa Vitória do Palmar, y desde allí comienza su recorrido delimitando la frontera entre Uruguay y Brasil. Luego de un recorrido de 45 km, desemboca en el Océano Atlántico.
Sobre esta desembocadura se encuentra el balneario uruguayo de Barra del Chuy, mientras que del otro lado del arroyo se ubica Barra do Chuí, el balneario más al sur de Brasil.
Laguna Merín
Por su parte, la laguna Merín (lagoa Mirim) es un extenso cuerpo de agua que ocupa un área de 3.750 km² y comparte territorio con Brasil y Uruguay. La laguna posee un largo total de casi 200 Km y un ancho promedio de 35 km. Estas dimensiones la convierten en una de las reservas de agua dulce más grandes del mundo.
Booking.comDel lado uruguayo encontrarás algunos balnearios en sus costas, con bonitas playas de arena y aguas de poca profundidad en donde podrás pasar un agradable momento. A su vez, la laguna es ideal para los amantes de la pesca deportiva, ya que es habitada por una gran variedad de peces. También reúne las condiciones necesarias para el desarrollo de deportes acuáticos, especialmente la vela, ya que el viento es constante durante todo el año.
Finalmente, las extensas playas, los montes naturales y los muchos kilómetros de bañados y humedales que rodean la laguna favorecen el desarrollo de muchísimos animales silvestres. Con ellos conviven cientos de aves de diferentes especies que hacen de este sitio un sueño para cualquier aficionado al ecoturismo.
Parque Nacional San Miguel
A 14 km de la ciudad de Chuy se encuentra el Parque Nacional San Miguel, creado en 1937. Desde el año 2010 integra el Sistema nacional de áreas naturales protegidas de Uruguay.
El Parque Nacional San Miguel ocupa una superficie de 1500 hectáreas y en su territorio predominan las llanuras bajas internas que alternan con sitios más altos de sierras rocosas. A lo largo de la sierra de San Miguel aparecen cerros de elevación moderada, entre los que destacan el Cerro Picudo, de 100 metros de altura, y el Cerro Vigía, de 152 metros. Ambos constituyen 2 de los 3 atractivos principales del parque.
El acceso a la ruta al Cerro Picudo se ubica sobre la Ruta 19. El sendero está bien señalizado y consiste en una ruta de unos 3 km que puede hacerse a pie, en auto o a caballo (se alquilan en el Fortín de San Miguel). A pie o a caballo es como mejor se aprecia la vegetación de la zona, poblada de eucaliptus, ceibos, sauces, palmeras y más. Además, podrás detenerte a leer los paneles con información sobre la flora y fauna que hay a lo largo del recorrido.
Booking.comCuando llegues a la cima, te encontrarás con una linda postal del pueblo 18 de Julio, el arroyo San Miguel, un importante manto verde de vegetación y una sensación de paz impresionante.
Fortín de San Miguel
El Fortín de San Miguel es la estrella del parque y principal atractivo. Además, es testigo principal de las luchas entre España y Portugal, quienes se disputaban los territorios de esta región. El fuerte fue construido en 1734 por los españoles y conquistado años después por los portugueses, quienes finalizaron la obra. En 1763 España recuperó el mando, aunque tiempo después lo abandonó porque no les resultaba estratégico.
